Jueves 20 de Abril de 2006 - (Debate)

 

El cambio cultural de las nuevas formas digitales y la modificación de hábitos comunicacionales en la sociedad de la información y la cibercultura

 

Por Beatriz Fainholc

http://weblog.educ.ar/educacion-tics/archives/007325.php

1. Donde estamos

Algunas personas oponiéndose, otras en transito y otros ya nacidos en la cultura mediática que vivimos en el siglo XXI, dentro del paradigma de convergencia digital de tiempos post-analógicos. Se establece allí, otra epistemología que implica una enorme discontinuidad dada por un cambio cultural y por ende, generacional.

Los sistemas tecno-comunicaciones interactivos existentes transforman las coordenadas clásicas del espacio y el tiempo y por ende, las dimensiones de la vida humana en relación. El espacio es de flujos y el tiempo es atemporal (Castells, 1997) (1) que trasciende e incluye la variedad representacional de lenguajes y soportes que históricamente se conocen.

Estos contextos inéditos que se caracterizan por interacciones mediadas por las TICs imprimen marcos de pensamiento, sentimiento y acción diferentes a los habituales que caracterizaron a las generaciones anteriores. Transcurren por los teléfonos celulares en permanente expansión, que usan niños desde 8 a 12 años ….
A partir de ellos se puede (y podrá cada vez mas) enviar mensajes de texto y navegar en Internet, pronto hacer llamadas para hablar con video, leer historias cortas o capítulos de libros y ver dibujos animados. Piénsese en la escuela y los profesores y el choque que ello significa…
Se trata de tiempos de alta complejidad multimedia y lectura hipertextual, de realización en red de multitareas (o tareas simultaneas) veloces y urgentes, donde se prefiere probar y hacer mas antes que reflexionar y planear, a través de los nuevos dispositivos móviles de comunicación.

 


2. Lo que es necesario hacer

Replantear el sentido de los procesos de comunicación y de la formación del profesorado para criteriosamente – no todo sirve…- incorporar los nuevos escenarios del mundo de la innovación tecnológica porque la misma constituye la segunda naturaleza en que viven las personas.
Mas allá de las distancias socioculturales, estos usuarios consumen flexible e indiscriminadamente medios, mediadores y mediaciones que no puede quedar recortadas o marginadas de una consideración formativa. Ello implica ciertamente, un cambio cultural profundo a través de la convergencia tecnológica existente, como se dijera, que configura los entornos de aprendizaje.
Tomar en cuenta todo esto constituye una tarea ciclópea hacia la consideracion de nuevos diseños curriculares. Ello significa incorporar y articular las nuevas tecnologías en forma y contenido en conjunto con las nuevas o TICs, para organizar las tramas de sentido que nuestros usuarios (niños/as y jóvenes) consumen, necesitan y esperan en los nuevos tiempos, en los espacios en que se mueven , ya que sus mentes funcionan de otro modo, lo que debe ser reconocido…..

Para estos tiempos se requiere en todo usuario ,- profesores, padres, niños/as y jóvenes y adultos-, del desarrollo de competencias mediaticas si se apunta a un dominio fértil de las nuevas tecnologías desde el punto de vista del desarrollo de la pertinencia epocal como de las funciones superiores del discernimiento acorde a las acciones de personas y grupos para que sean ricas en el intercambio y la productividad .

Tales competencias se apoyan en anteriores alfabetizaciones audiovisuales e informáticas – a veces no del todo desarrolladas aun en los usuarios en transito a los nuevos mundos digitales- que han desplegado sus respectivas habilidades de lectura, comprensión y transferencia de procesos y productos simbólicos. Ello posibilita lecturas comprensivas y criticas (Fainholc, 2004) (2) mas profundas , navegaciones inteligentes en entornos mediados electrónicamente e interacciones mas provechosas para una construcción de saberes distribuidos por la convergencia tecnológica.
Sin embargo en la cibercultura , estas dimensiones cada vez mas de relaciones semiológico-sociológicas dadas por las mediaciones virtuales, -sincrónicas y asincrónicas, - aumentan de peso, a la par que las relaciones físicas de cara a cara aunque no desaparecen, afortunadamente, son de menor presencia.

Esa sensación y la búsqueda respectiva, de superar las barreras geográficas y temporales para participar casi de “ algo mágico” como atrapar de cerca lo que es casi inasible porque es remoto, o que tal vez el anonimato que caracteriza a muchas de las comunicaciones electrónicas, estimula diversas desinhibiciones, podría hacer que las comunicaciones por correo electrónico y el chat en las PC y los mensajes de textos con el auge superlativo de los teléfonos móviles, en ese orden de aparición y magnitud en la escena social, crezca exponencialmente y alcance a miles de millones de usuarios en los próximos tiempos.

3. No todo es panaceico

Sin embargo como bien se comprende, nada es panaceico. Existen junto a los rasgos que caracterizan las operaciones de tales mediadores y mediaciones, como son la instantaneidad, espontaneidad y rapidez, diversos riesgos que son necesarios reconocerlos a los fines de apropiar tales propuestas del modo mas pertinente, según contextos y actores de una formación, y potentes en términos de su aplicabilidad y productividad.
Virilio, P. (1998) (3) se refiere a la desorientación que pueden provocar pensando que se corre el riesgo de perder la dimensión de lo real, o que es difícil detectar la diferencia entre lo real y lo virtual , lo que lleva a dificultar a su vez la diferencia y reciprocidad o interalimentación entre la actualidad y la historia . Se cree en esta hipertrofia electronificada de modo desmedido, redundante, vertiginoso y superfluo ignorando que toda época histórico- social ha inventado y utilizado diversas tecnologías a partir de los específicos momentos que habrían permitido su uso o favorecido su aparición y difusión (sin olvidar que siempre han estado ligadas a razones económicas…..)

El teléfono móvil hace ruido e interrumpe cualquier situación emprendida, es invasivo y distrae aunque se prioriza esta disrupción al punto de revertir lo que es importante, porque el usuario de este modo, se destaca o sobresale del resto. También es dable observar que la mayoría de estos usuarios contemporáneos tienden a marginar a los no usuarios de estos soportes y registros, al contemplar el mundo en un cortoplacismo que usa anteojeras, lo que acaba en la practica de una segregación y menosprecio ya no clasista y racial – aunque puede incluirlas- sino etaria y generacional.

Otros hacen referencia al retaceo de la riqueza comunicacional porque no es posible poner matices en la emisión mediada de los mensajes remotos como poder trasuntar los grandes valores que deben gozar de permanencia los esfuerzos comunicacionales y formativos aunque incluyendo el correspondiente aggionamento epocal.
Otras voces mas adjudican a la velocidad habitual de estas interrelaciones, el deterioro, deformaciones y achicamiento - a través con las abreviaturas y onomatopeyas- del lenguaje oral (en los chats ) como del escrito (en los mensajes de texto) que reinan en general, no vinculado solo a la edad sino al tamaño de la pantalla donde se debe escribir. Por ende, se desarrolla un nuevo registro o jerga o lenguaje que parte de ninos y adolescentes pero que se derrama y copia en todos los estamentos sociales que persigue “permanecer joven”….Las palabras se cortan y se agregan muletillas repetidas redundantemente porque se quiere hablar mas en menos tiempo.
El lenguaje se resume o comprime (lo que ya se veia en los chats y correos electronicos), se achica y se empobrece. No dejar pasar por alto que asi tambien, se evita el dialogo rico y comprometido de ideas y el debate amplio de opiniones incluso contradictorias a cambio de contar rapido lo mismo a muchos al mismo tiempo : la tecnología ha posibilitado esto.
Como para hablar y comunicarse se debe escribir, se debe reconocer que si bien los chicos escriben mucho – lo que no es poco- lo hacen mal y sin profundizar en los vinculos, que son superficiales y vacios. Copia de los habitos sociales existentes en el posmodernismo o al reves?

4. Las nuevas dimensiones comunicacionales.

Por el contrario, creemos en la aparición de un nuevo registro propiciado por los procesos y soportes de comunicación interactiva instantánea, que es lo que no se debe despreciar sino por el contrario, reconocer y capitalizar a fin de saber cuando y como deben ser usados de modo inteligente y combinado con el resto de los recursos existentes.
En el marco de apropiar oportunidades electrónicas para campos formativos, es que optamos por valorizar todas las formas simbólicas que las personas y grupos han creado y desarrollado como formas culturales expresivas a lo largo de la humanidad, mas allá que creamos o no en ellas, o sea deben ser consideradas realmente ricas porque constituyen parte de la cultura vigente, para desmisificarlas y/o incluirlas en situaciones formativas.

Como se dijera, la opción es no solo superar la lógica instrumental cuando todo y cualquier medio se convierte en un fin en si mismo con su subyacente racionalidad lineal sino enmarcar las acciones comunicacionales dentro de una racionalidad recursiva, expresivo-comunicativa inscriptas en otra epistemología y ética.

Toda situación formativa (familiar, escolar, la de los MCSocial, etc.) debería ayudar a reconocer los nuevos lenguajes simbólicos, sus géneros y su pertinencia respecto de su uso en diferentes situaciones de enunciación y participación. Asimismo es util delimitar el habla (o argot) cotidiana de la calle para diferenciarlo del de la escuela o la universidad, establecer limites en sus usos en los espacios públicos y otros.

Por lo mismo seria necesario apuntar a combinar todas las formas de intercambio para la rica formación de la subjetividad a través de la interacción intersubjetiva, que ahora se potencia y media electrónicamente.

Por todo lo señalado así como habrá que diseñar todos los curricula de nuevo, no todo se puede enseñar con las TICs así como la presencialidad o la relación cara a cara no será reemplazada nunca. Sobretodo esto ultimo por las diversas razones que brevemente se exponen:

1- el Psicoanalisis sostiene que las figuras de carne y hueso (padres, hermanos, pares, otros significativos, etc.) son centrales para la elaboración de los vínculos: las miradas, tocarse, hablarse, etc. ponen en juego el deseo de las personas. También lo enunciado coadyuva de modo central a través de la comunicación a garantizar la configuración de la identidad.

2- El Interaccionismo Simbólico asegura que el intercambio de roles y expectativas es necesario en toda socialización temprana y/o secundaria (o especializada) como aporte para el desarrollo personal y luego profesional competente.

3- Todo intercambio social debe estar enmarcado en situaciones de justa frustración y/o espera ante la llegada de las respuestas ya que ello es saludable como ejercicio que compense la excesiva velocidad que las maquinas provocan hoy en la llegada de los datos . Si no la hubiera se anularian otros mecanismos psicológicos importantes en la persona que se relaciona y comunica con otros tales como poder anticipar, imaginar, fomentar el pensamiento superior simbólico, etc. que enriquece la solución de problemas y ayuda a madurar emocionalmente.

4- Desde el punto de vista socio cultural no incorporar o haber incorporado (la moda tecnocrática de) los soportes y registros en cuestión, denuncia la practica de un tipo de etnocentrismo , una forma de marginalidad y una faceta de la falta de respeto segregador de la diversidad . No se acepta (o no se “puede” aceptar) correr el riesgo de “no pertenecer” , y así convertirse en excluido (Baumman, 1999) (4). Poseer un celular y escribir mensajes de texto es estar conectado pero no necesariamente significa comunicarse: lo que cuenta es “contar con la apariencia” , y sobretodo no estar solo/a pensando que estar con otro/a implica automáticamente la profundidad de un autentico encuentro humano , que no es así.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
1. CASTELLS, M. (1996): “La era de la información”, Vol.1, 119, Alianza, Madrid,
2. FAINHOLC, B. (2004): “La lectura crítica en Internet”. Edit. HomoSapiens, Rosario.
3. VIRILO, P. (1998): “La dinámica global / local”. Edit. La Crujía, Bs. As.
4. BAUMANN, Z. (1999): “La globalización. Consecuencias humanas”. FCE. México