EVALUACION PSICOPEDAGOGICA
Lourdes Martínez Reina
En este trabajo se aborda la Evaluación Psicopedagógica
desde un enfoque global. Se concibe la Evaluación como un proceso en el que
participa toda la comunidad educativa, estableciendo un proceso secuenciado en
distintas fases. El final del proceso irá orientado hacia el desarrollo de un
Programa de Intervención Individualizado, que será sometido a un seguimiento
para conocer su evolución.
I.
INTRODUCCIÓN.
Son muchos los enfoques que coexisten en los diferentes
Departamentos de Orientación debido, a veces, a la diferente formación inicial
de quienes los coordinan (el campo de las Ciencias de la Educación, el campo
de la Psicología desde sus diferentes tendencias...), otras veces, a la propia
opción personal y profesional que lleva a considerar desde una perspectiva
determinada tanto las funciones que se deben desarrollar desde el Departamento,
como la metodología a través de la cual se llevarán a cabo esas funciones.. No
hay que olvidar que el marco legal que sustenta a los Departamentos de
Orientación es muy general, por lo que la concreción de los diferentes
programas o planes de intervención pueden ser muy diversa.
Por ello, considero necesario situar el modelo de
intervención en el que me baso antes de abordar cuáles son los elementos que
van a conformar la Evaluación Psicopedagógica y de presentar la secuenciación
del proceso que ha de seguir su elaboración, aplicación y seguimiento.
Tanto la manera de analizar las diferentes dificultades
que se manifiestan en los distintos planos de la institución como las
estrategias que se utilicen para su solución, deben abordarse desde un enfoque
global que permita vislumbrar las posibles interacciones entre los factores
intervi-nientes. De esta manera, la evaluación psicopedagógica será un proceso
de indagación en el que se analiza la situación del alumno/a en el marco del
Centro, del aula y de la familia.
Este proceso de exploración no va a recaer sólo en la
persona que coordina el Departamento de Orientación sino que, como veremos más
adelante, tanto el equipo educativo como el tutor/a se harán también partícipes
del proceso, por una parte como personas que aportan una visión complementaria
y al mismo tiempo fundamental en la Evaluación y, por otra, como sujetos de la
exploración.
La evaluación psicopedagógica recaerá, por tanto, sobre
diferentes sujetos y sistemas interrelacionados entre sí: el Centro, el equipo
educativo, el alumno/a y la familia.
2.
CARACTERÍSTICAS DE LA EVALUACIÓN
PSICOPEDAGÓGICA.
• La Evaluación Psicopedagógica es considerada aquí como
un proceso y, por tanto, no termina cuando se adoptan una serie de medidas
concretas de actuación, sino que el seguimiento de las decisiones y las
estrategias de actuación que se han puesto en marcha forman también parte de
la Evaluación.
• Tanto la fase de exploración como la toma de decisiones,
las actuaciones concretas y el seguimiento exigen una corresponsabilización y
participación de los/las profesionales que intervienen en el proceso de
enseñanza/aprendizaje. Por ello, el inicio del desarrollo de la Evaluación se
llevará a cabo en el momento en que comience la interacción de sus elementos,
al principio de curso, como se verá más adelante.
• Es necesaria la contextualizaci6n, por lo que tendrán que
valorarse aspectos diferentes del contexto escolar: interacciones personales,
estilos de aprendizaje de los alumnos/as, aspectos metodológicos del
profesorado, criterios de evaluación que se mantienen, selección de materias
optativas, formas de agrupamiento, etc.
• La Evaluación psicopedagógica no sólo pretende prestar
ayuda al alumno/a sino también al profesorado (orientaciones metodológicas,
estrategias de intervención...) y a la misma institución escolar.
• Por lo que se refiere al desarrollo curricular, la
evaluación habrá de referirse a la adecuación de objetivos, contenidos y
orientaciones planificadas en los proyectos curriculares, y ello exigirá
aportar sugerencias desde el campo específico de la psicopedagogía.
• Es preciso tener en cuenta que la aparición de los
desajustes se produce en sujetos en situación de enseñanza/aprendizaje por lo
que habrá que indagar sobre: relaciones del grupo/clase, organización escolar,
adecuación de objetivos, contenidos, enfoque metodológico y proceso evaluador...
• Es importante también reflejar que las intervenciones
derivadas de la Evaluación pretenden modificar las manifestaciones de los
problemas en el ámbito escolar. de manera que otro tipo de intervenciones, como
las actuaciones con la familia y los programas psicológicos individuales tendrán
un carácter complementario aunque a veces imprescindible para la superación de
algún tipo de dificultades.
• Por último, es preciso señalar que la Evaluación
Psicopedagógica pretende facilitar la comunicación
entre la familia y el Centro, a través del intercambio de
información y del apoyo mutuo en las intervenciones., llegando a la adopción de
medidas y acuerdos comunes que no contrapongan actuaciones en el centro, por
una parte, y en la familia , por otra.
3.
CONFIGURACIÓN DE LOS ELEMENTOS DE
LA EVALUACIÓN PSICOPEDAGÓGICA Y SECUENCIACIÓN DE
PROCESO.
La función del coordinador o
coordinadora del Departamento de Orientación tendrá dos momentos relevantes
de actuación respecto a la evaluación. Por una parte, en una fase previa, actuará
como asesor/a y ayuda del equipo educativo cuando, al principio de curso, se
lleve a cabo una exploración general del grupo/clase. En este momento se
facilitará tanto la elección de los instrumentos adecuados para la obtención
de información como los Indicadores de Evaluación que pueden guiar un
desarrollo adecuado en el proceso de enseñanza/aprendizaje.. Este será el
punto de partida para iniciar el proceso de toma de decisiones.
Por otra parte, cuando se producen desajustes y se va
reflejando a través de la evaluación la aparición de problemas en algunos
alumnos/as comienza una fase específica en
la que la exploración debe ser más profunda Esta evaluación pretende detectar
las causas que pueden estar originando y/o manteniendo un desarrollo
inadecuado y dar pistas para las medidas y cambios que sean necesarios
adoptar.
3.1. Fase previa
El equipo educativo o el tutor/a realizará, con el
asesoramiento que necesite del Departamento de Orientación, una exploración
inicial del grupo de alumnos/as. Algunos de los aspectos más relevantes de
esta exploración , por la incidencia que pueden tener en el proceso
educativo,son:
• Expectativas que el alumno o alumna posee respecto a sus
estudios, a los profesores/as, a las diferentes áreas o materias, al Centro...
• Autoconcepto y autoestima. La exploración de cómo se ha
ido formando su autoconcepto y del nivel de autoestima que posea es
imprescindible por la repercusión que tienen en la motivación de logro y en el
desarrollo adecuado del proceso de maduración.
• Estrategias de estudio que utiliza: planificación y
organización del estudio, condiciones, técnicas...
• Atribuciones causales respecto a su éxito o fracaso Los
parámetros de atribución interna/externa., variable/invariable, controlable/¡
ncontrolable...determinan la resistencia al cambio y ala mejora de la
situación problemática, por lo que conocer estas atribuciones puede ser un
factor inestimable de ayuda para abordar cambios significativos en los alumnos/as.
• Motivaciones ante el estudio
• Preferencias de asignaturas y determinación de las
mismas en la adecuación del proceso.
• Experiencias previas de éxito o fracaso como causas de
mantenimiento de actitudes negativas.
• Ideas previas sobre conceptos de materias específicas
• Etc.
Es imprescindible que desde este momento se comience a
trabajar con los equipos educativos el sentido que posee la evaluación en la
Educación Secundaria Obligatoria, qué aspectos van a evaluarse, cómo
evaluarlos..etc,. con objeto de que desde el principio vayan teniéndose en
cuenta los indicadores fundamentales del desarrollo de los alumnos/as que
servirán de guía o referente para detectar si aparecen desajustes y para tomar
las decisiones oportunas (adaptaciones curriculares, cambios metodológicos,
agrupamientos de alumnoslas ... ).De esta manera se contribuirá a la formación
del Profesorado en el centro y a la investigación sobre sus propias prácticas
educativas.
3.2. Fase específica
La exploración en esta fase, por tener un carácter
específico en cuanto a lo se indaga sobre los desajustes o problemas que han
podido surgir, se ceñirá a explorar e investigar de una manera más profunda
sobre las posibles causas que los generan.
A grandes rasgos, los métodos empleados y la secuenciación
serán las que a continuación se exponen:
Cuestionario de
derivación:
El tutor/a o profesor/a cumplimenta el cuestionario que le
entrega el orientador/a, en el que se pretende recabar la información
pertinente. El objetivo de estos cuestionarios es centrar o focalizar la
problemática aportando observaciones y reflexiones ante la misma desde
diferentes puntos de vista: tutor/a, profesores/as de distintas áreas o
materias...
Los cuestionarios de derivación pueden tener gran
variabilidad: desde aquellos que poseen un carácter cerrado en el que se van
marcando los aspectos observables hasta aquellos otros que sólo contienen
epígrafes de gran apertura .Es aconsejable que se generen en el propio Departamento
con objeto de recabar aquello que se entienda fundamental o realmente
significativo y de contextualizar al máximo el proceso de indagación.
En este punto se manifiesta de manera expresa la
corresponsabilidad del orientador/a con el tutor/a y el equipo educativo en el
proceso que conlleva la Evaluación Psicopedagógica.
Entrevistas
iniciales
Las entrevistas desempeñan un papel fundamental en el
proceso de exploración. y, sin ellas, la información obtenida en los
cuestionarios corre el riesgo de desvirtuarse y generar falsas interpretaciones
Las entrevistas tendrán un carácter variable tanto en lo que se refiere al
momento en el que se realicen (inicial, de devolución y de seguimiento) como en
relación a los sujetos entrevistados (tutor/a o profesora, familia y
alumno/a):
·
El
orientador/a realizará una entrevista inicial con la persona que haya
cumplimentado el cuestionario de derivación, con objeto de aclarar y perfilar
la información manifestada en el cuestionario. Además, podrá conocer y
profundizar sobre las estrategias de intervención iniciadas, compartir el
análisis de los hechos, consensuar tanto los objetivos que se pretenden
alcanzar con la evaluación como la responsabilidad que cada cual tendrá en el
proceso.
·
El
orientador/a entrevistará también al alumno o a la alumna con el fin de
conocer su explicación sobre los problemas que tiene en su aprendizaje y podrá
utilizar este momento para la exploración de algunos de los aspectos planteados
en el apartado de la fase preliminar pero de una manera más específica e
individual.Esta entrevista podrá realizarse junto con el tutor/a o
independientemente, según se estime más oportuno.
·
La
entrevista inicial también tendrá lugar con la familia, con objeto de conocer
su explicación sobre los problemas que el alumno o alumna tiene en el
aprendizaje y de analizar cómo se vive la problemática desde el punto de vista
familiar, así como la posible influencia que este contexto pueda tener tanto en
su génesis como en su mantenimiento. Por otra parte, esta entrevista inicial
con la familia posibilitará la adopción de estrategias de intervención
conjuntas.
Observación
La observación es otro de los recursos que mayor
información puede aportar en los procesos de exploración e investigación.
El orientador/a observará al alumno/a en clase y en otros
lugares y actividades del Centro. La observación en el aula nos va a permitir
realizar un análisis de la problemática en la situación en la que éste se
manifiesta, permitiéndonos hacer un estudio contextualizado del mismo. Los objetivos
que se persiguen son varios:
·
Conocer
de qué manera se desarrolla la dinámica relaciona¡ en el aula y qué tipo de
interacciones se establecen en el grupo clase, concretamente referido al
alumno/a que va a ser objeto de una observación más minuciosa.
·
Conocer
las normas y reglas de funcionamiento que rigen la clase con objeto de adecuar
nuestras orientaciones al contexto en el que han de llevarse a cabo.
·
Analizar
las relaciones entre el alumno/a y el profesorado y entre el alumno/a y su
grupo.
·
Conocer
cuáles son las dificultades que se le plantean al alumno/a cuando ha de
afrontar la realización de una tarea en el interior de un grupo o
individualmente.
·
Conocer
la adecuación y/o dificultades de los trabajos que el alumno/a realiza en
relación a sus propias capacidades y en relación al nivel del grupo/clase.
·
Calibrar
la receptividad del profesora en relación a la información y/o sugerencias que
el orientador/a pueda realizar, adecuando y contextualizando tanto las
indicaciones posteriores como las estrategias de actuación sugeridas.
·
La
decisión del tipo de observación que se va a realizar y de las variables que
se van a observar estará en función de distintos factores, aunque básicamente
estará centrada en la problemática planteada.
·
La
observación fuera del aula atenderá al tipo de actividades que realiza, a la
relación con los compañeros/as y con los adultos/as, a su actitud respecto a
las normas y hábitos del Centro, a su participación, etc...
Análisis de los
trabajos del alumno/a
El análisis de los trabajos y tareas realizados por el
alumno/a es un elemento dentro de la evaluación psicopedagógica que nos
permite completar la observación, analizando qué tipo de trabajo realiza y los
materiales que utiliza para llevarlo a cabo.
Algunos de los aspectos que pueden valorarse de los
trabajos son:
El material
El orden y la organización
La claridad
El contenido
Anotaciones del profesor en el trabajo
Calificación del trabajo
Entrevistas de
devolución
Llamamos entrevistas de devolución a las que realiza el
orientador/a con el tutor/a, familia y alumno/a una vez realizada una hipótesis
explicativa de aproximación después de la exploración. Estas entrevistas son
fundamentales, ya que en ellas se consensúan las estrategias de intervención y
se planifican las responsabilidades que deberán asumir los diferentes ámbitos
implicados en el proceso: profesorado, familia o alumno y alumna.
De estas entrevistas surgirán, pues, las medidas que será
preciso adoptar, el programa que se va a desarrollar, la colaboración que se
demanda de cada grupo o persona, las previsiones de mejora, los medios que se
precisan para el fin que se pretende alcanzar, la planificación del
seguimiento,etc.
4. PROGRAMA INDIVIDUALIZADO.
La Evaluación Psicopedagógica dará lugar a un programa de
intervención individualizado: En ese programa se contemplarán las medidas
relacionadas con los diferentes aspectos de la evolución del proceso de
aprendizaje y desarrollo del alumno o alumna en cuestión, como puede ser:
·
La
selección de áreas comunes más aconsejables para el alumno/a
·
La
adaptación de la metodología más adecuada, en función de las carencias
observadas.
·
La
creación de condiciones que permitan superar los bloqueos que obstaculizan el
aprendizaje.
·
Las
estrategias de ayuda en la adquisición de estrategias de trabajo intelectual
que pudieran estar influyendo en sus dificultades.
·
La
creación o mejora de un clima de aula adecuado que favorezca unas relaciones
fluidas y positivas entre sus miembros.
·
La
mejora de las relaciones que dificultan el estudio y generan actitudes de
rechazo al mismo.
·
Las
materias optativas que puedan contribuir mejor al desarrollo de las capacidades
enunciadas en los objetivos generales de etapa.
·
Las
intervenciones individualizadas que permitan generar en el alumno o alumna
estrategias de autoayuda.
·
Etc.
Este programa deberá incluir la previsión del tiempo en el
que se espera desarrollar las intervenciones que han sido planificadas.
5. SEGUIMIENTO DEL
PROCESO.
No basta poner en marcha los programas de intervención,
es preciso conocer qué y cómo se está desarrollando y preveer los cambios
necesarios en función de los resultados que se vayan observando. La entrevista
y la observación serán, fundamentalmente, las técnicas empleadas en el proceso
de seguimiento.
a. Entrevistas a los
implicados en el proceso
Las entrevistas de seguimiento tendrán como finalidad
conocer la opinión de las personas implicadas en la evolución del programa y,
a partir de ellas, podrán revisarse las estrategias de intervención, introducir
nuevas medidas, adoptar cambios, etc...
b. Observación.
Los escenarios de la observación serán aquellos en los que
se va a desarrollar el programa de intervención.
Es preciso contemplar cuáles serán los indicadores que van
a observarse y que reflejan la marcha de las iniciativas que se han previsto,
su repercusión en la modificación de la problemática planteada, la participación
de uno de los ámbitos implicados en el proceso (profesorado, familia, alumno o
alumna, grupo clase..) y la necesidad posible de introducir nuevos
cambios en la toma de decisiones.