LA NOTICIA: UN ÚTIL RECURSO PARA DESARROLLAR LOS
PROCEDIMIENTOS
Francisco Bastida
M.C.E.P. Murcia
Este trabajo nos habla de la noticia
como útil recurso para abordar la Historia Contemporánea y otros aspectos de las
Ciencias Sociales y la Geografía en el Ciclo Superior y en la Enseñanza
Secundaria Obligatoria. El tratamiento de la información, la indagación y la
investigación son algunos de los procedimientos que tienden a favorecer este
útil recurso didáctico.
Tradicionalmente, y también desde el modelo de
pedagogía por objetivos que ha sustentado el diseño de los programas escolares
actuales, se ha puesto todo el énfasis, tanto en el proceso educativo como,
obviamente, al evaluar, en la asimilación y retención de contenidos teóricos
acerca de las diferentes materias. De aquí que casi todos los modelos de
pruebas que se suelen utilizar se dirigen a intentar capturar cuánto de la
información suministrada retuvo el alumno. Mucho menos interesó averiguar
cómo fue el proceso de asimilación y qué estrategias y mecanismos intelectuales
se pusieron en juego y se desarrollaron durante el camino.
Estamos con A. l. Pérez cuando escribe que “la
traslación de los valores desde los procesos a los productos, la primacío de
los resultados observables, la separación de los medios y los fines así como la
justificación ética de los medios en virtud del valor de los productos son, a
mi entender, las manifestaciones más evidentes y sutiles en la actualidad del
principio de alienación humana. Este principio se aloja en la concepción instrumental
de la vida del hombre y se refleja en el modelo tecnológico de intervención
educativa, obsesionado por la eficiencia y la productividad observable y
cuantificab1e”, (Pérez, 1990, p.11)
El modelo inicial de Diseño Curricular Base de
Geografía, Historia, CC.SS., al tratar de los contenidos, incluía en éstos
tanto los ejes temáticos de contenidos a conocer, como las constantes
metodológicas o de procedimientos (los posteriores ejes procedimentales),
subrayando así la importancia del proceso, la puesta en juego de los mecanismos
de aprendizaje. Nos parece un paso importante en la filosofía curricular.
Aunque posteriormente, y como afirma V. Abalo, este
aspecto ha sufrido cambios con respecto al DCB inicial, aún es posible
aprovechar parte de esta oferta en el momento de desarrollar el nivel de
concreción correspondiente.
La aprehensión de conceptos y conocimientos, el
dominio de una determinada disciplina conlleva de parte del individuo poner en
funcionamiento unas estrategias intelectuales adecuadas que hagan posible ese
aprendizaje. Estas estrategias, esos procedimientos son distintos para cada
ciencia o conjunto de estudio. “El procedimiento es aquello que constituye
una habilidad intelectual específica que desarrolla de manera propia una disciplina
concreta” (Hernández y Trepat, 1991). El procedimiento, no obstante ser una
actividad intelectual, hace referencia casi siempre a una manipulación: uso de
instrumentos para la orientación; manejo de cartografía; trazado de croquis;
clasificación de diferentes materiales o documentos históricos, etc.
Dentro del nutrido “menú” de procedimientos que
pueden utilizarse en el ámbito de la Historia, Geografía y Ciencias Sociales,
el DCB propone tres como básicas: la indagación y la investigación, el
tratamiento de la información y la casualidad múltiple.
Vamos a detenernos ahora en las posibilidades que
ofrece la noticia (recogida desde sus diferentes soportes: transmisión oral,
prensa, radio, T. V.) para el tratamiento de los tres procedimientos citados.
El tratamiento de la noticia en la escuela se
justifica por varias razones con importante peso propio: necesidad de dominar
los diversos medios de comunicación y sus lenguajes; fuerza motivadora de la
noticia en sí misma; recurso que nos pone en contacto con el entorno
inmediato; capacidad de globalización de disciplinas en torno a ella, etc.
Pero además, la manipulación de este recurso en la ESO
nos va a permitir desarrollar de un modo práctico los procedimientos que
propone el DCB y muchos otros.
Los diferentes medios de comunicación, no sólo
aportan las informaciones, las noticias escuetas, sino que éstas vienen
arropadas y ampliadas con multitud de datos y documentos que son otros tantos
detalles a considerar en el momento de poder emitir un juicio sobre aquéllas.
Informes, datos estadísticos, resultados de encuestas, planos y mapas; gráficos
donde se muestra el desarrollo de un conflicto o suceso, representación en
mapas o cortes orográficos de diferentes fenómenos geológicos, meteorológicos,
demográficos, firmas de acuerdos, tratados, declaraciones de alto el fuego,
etc., son algunos de los materiales que podemos encontrar en revistas y
periódicos, a los que debemos añadir los que proporcionan radio y televisión.
Gran parte de este material es usado inmediatamente en las clases donde el
trabajo con la prensa es sistemático. Otro pasará al archivo de documentos a
esperar su oportunidad de ser usado.
La inmediatez de los hechos contemporáneos viene
acompañada de gran abundancia de datos, como hemos visto. Ello exige un
tratamiento adecuado para que puedan ser usados con provecho:
● Ordenación, según las fuentes.
● Crítica de esas fuentes (filiación,
tendencia, posición política, grupos económicos que la sustentan.)
● Clasificación de los documentos:
declaraciones, cartas, fotos, etc.
● Verificación, en su caso,
y en la medida de lo posible, de su autenticidad y de su consistencia (rumor,
opinión, impresiones recibidas de otros, declaraciones de testigos, etc.)
● Selección de los más pertinentes para el
asunto que trabajamos.
● Interpretación de los documentos,
reconstrucción de los hechos, análisis y crítica.
(Queremos recordar la importancia que este proceso
y para esta actividad tiene un archivo de documentos lo más nutrido y amplio
posible, elaborado por profesores y alumnos. Este debe formar parte de todo
un particular arsenal de recursos con que debe contar el aula‑seminario
de Ciencias Sociales, de la que hablamos más extendidamente en otro lugar
(Bastida, 1985).
El trabajo con la noticia en el aula pasa por una
actividad periódica tan importante como ineludible: el coloquio sobre prensa.
Durante él, alumnas y alumnos, con la documentación elaborada, van exponiendo
sus trabajos (ayudados por el planisferio de noticias). El maestro modera,
coordina, provoca la aparición de las opiniones y de las hipótesis sobre los
hechos en estudio. Desvelar el peso y/o la veracidad de cada una exige barajar
las distintas informaciones de que se dispongan. Muchas veces tendremos que
remontarnos al pasado para rastrear algunas de las causas históricas que
estaban en el origen de los hechos que ahora analizamos.
Así, tendremos que considerar la importancia
económica de los elementos implicados (países, empresas grupos sociales...),
la ubicación geográfica de los acontecimientos, el poder bélico, las
ideologías políticas enfrentadas, el peso de las diferentes etnias, pensamiento
religioso, costumbres y tradiciones, el poder de los medios de comunicación,
la personalidad de sus dirigentes, las respectivas relaciones de los grupos en
conflicto con los grandes poderes fácticos que pueden controlar el desarrollo
de los acontecimientos, etc. Todo ello debe ser debatido, intentándose que
todos los puntos de vista se coloquen sobre la mesa.
Pero, quizá, este contraste verbal sobre los materiales
que poseemos no sea suficiente y exija, como queda apuntado, bucear en la
historia pasada; seguir durante un tiempo el desarrollo de los hechos,
recopilar más materiales, para verificar el error o certeza de nuestros puntos
de vista e hipótesis.
Sostenemos que la prensa y, en general, el trabajo
con la noticia es un recurso especialmente privilegiado para abordar la
Historia contemporánea al igual que otros muchos aspectos de las Ciencias
Sociales y la Geografía. Pero es que desde ella, y como acabamos de mostrar,
cada parcela de la actualidad que intentamos conocer desde la información
diaria (sobre todo, aquéllas que despiertan un interés especial en nuestros
alumnos/as) reclaman indagar sobre múltiples aspectos para poder tener sobre
las mismas una idea correcta y completa. Desde el archivo de documentos a la
biblioteca de aula, pasando por la videoteca y fonoteca, el recorrido, si
interesante, puede ser largo.
Hemos mostrado ya el trabajo con dos procedimientos
que son, a su vez, dos aspectos de la propia investigación. Desde que aparece
un hecho, una noticia, un acontecimiento motivador, repletos de interrogantes,
hasta que los situamos, contextualizamos, respondemos a esas preguntas y
confirmamos o no las hipótesis de partida que podemos proponer, hemos tenido
que realizar un largo camino . Este implica el manejo y tratamiento de una
información inicial; su ampliación para realizar una primera aproximación a la
misma; la búsqueda de documentos que faciliten la situación de los hechos en un
marco bien preciso para hacer de ellos una lectura desde la mayor cantidad
posible de ángulos (geoeconómicos, sociales, culturales, etnológicos,
históricos...). Esta lectura nos ayudará a apreciar las diversas causas que
inciden en el comportamiento y desenlace de los hechos (casualidad múltiple) y,
en definitiva, a realizar nuestra particular interpretación de lo acontecido,
con la confirmación o refutación de las hipótesis de partida. El ciclo
investigativo se cierra así, aunque puede completarse, siempre que sea posible,
con la presencia de personas que hayan tenido una relación directa con los
hechos que podrán aportar nuevas perspectivas. Y en todo caso, si el tema tuvo
interés manifiesto debe difundirse a otra clase, a los padres y madres, etc.
BIBLIOGRAFÍA
BASTIDA MARTÍNEZ, F. (1985). La clase activa:
estructura y recursos. Apuntes de Educación, 18, pp. 8‑10 Madrid.
HERNÁNDEZ, F. X. Y TREPAT, C. (1991). Procedimientos
en Historia. Cuadernos de Pedagogía, 193, pp. 60‑64. Barcelona.
PÉREZ GÓMEZ, A. I. (1990): En Elliott, J., La
investigación‑acción en educación.Morata, Madrid, p.11.