Las cosas más importantes de la vida las aprendemos sin que nadie nos las enseñe\\\".
Con mayor o menor dificultad, los conocimientos conceptuales se aprenden, pero ¿y los valores? No son conceptos que se enseñan, sino que se aprenden. Tiene que haber alguien que, con su ejemplo o testimonio, los ponga ante nuestros ojos.
En la presente obra, valiéndose de relatos breves y creativas propuestas didácticas, la autora expone ante los lectores la finalidad principal de la filosofía: ver con los ojos de la mente otra realidad distinta, la otra cara de las cosas, y promover así el pensamiento divergente que guíe al alumno hasta los umbrales del conocimiento de los valores transcendentes para su vida.
Isabel Agüera, con una vida de dedicación absoluta a la literatura y a la pedagogía, tiene en su haber un amplio repertorio de obras, tanto para profesores como para alumnos y padres. Cuenta con numerosos premios de novela, ensayo y experiencias pedagógicas. Es Miembro de la Real Academia de Córdoba y premio Medios de Comunicación de la Junta de Andalucía por sus colaboraciones en prensa, siempre en la línea de reivindicar el humanismo, la tolerancia y el entendimiento entre las personas.
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