Si hace algún tiempo -poco- alguien nos hubiera dicho que, en el aula, sin más que conectarnos a un ordenador, íbamos a poder oír la voz de Neruda, Juan Ramón o Unamuno, entre otras voces ilustres,( http://fyl.unizar.es/GCORONA/interlet.htm ) seguramente a más de uno nos habría dado un discreto ataque de escepticismo. Si, además, nos hubieran asegurado que, antes de aparecer en los quioscos, sin salir de casa, todavía en pijama, íbamos a poder acceder a todos los periódicos y revistas de cualquier país y en cualquier lengua, no habríamos parado de sonreír irónicamente en un par de días. http://titulares.com .
La sorpresa habría sustituido a la sonrisa si alguien nos hubiera asegurado hace algún tiempo -poco- que íbamos a poder disponer de una nueva y excelente herramienta motivadora para nuestros alumnos. Sorpresa inmensamente agradable es lo que produce ver -¡por fin!- interesados a la mayoría de los distantes y fríos chicos y chicas que no terminan de entender y valorar el esfuerzo titánico que venimos haciendo para que, al menos, reciban con un mínimo interés muchas de nuestras propuestas y saberes.
|