LOS 5 PRINCIPALES o cómo alimentar la seguridad de nuestros alumnos desde los primeros días
J. Felipe Bermejo. In: ROZA, Belén; LOMAS, Carlos (Orgs.) Enseñar lenguas y aprender a comunicar(se) en contextos plurilingües y multiculturales., 14-07-2005. Pongamos que hablo de un alumno ideal. Ideal no en el sentido de brillante, de una asombrosa esponja que absorbe todos los saberes que nosotros, diligentes profesores, proporcionamos. No, me estoy refiriendo a un alumno del montón, bastante motivado el primer día pero que si no se cuida como si de un pez de pecera se tratase, termina por autoconvencerse de que el aprender idiomas no es lo suyo y de que la labor emprendida hace meses resulta más ardua de lo que pensaba. El asimilar y dominar una lengua extranjera fuera de los lugares en donde se habla es un hecho contra natura. Es como pretender adquirir un cuerpo musculoso y bien cincelado llevando una excitante vida sedentaria. Aprender una lengua, esto es aprehenderla, sería como ir al gimnasio. Se requiere una práctica continua, sin prisa pero sin pausa, una motivación sincera, autoestima y unas ganas locas de comunicarse... http://www.quadernsdigitals.net/index.php?accionMenu=hemeroteca.VisualizaArticuloIU.visualiza&articulo_id=8637&PHPSESSID=4507a4c76318b020515f2082bda56e4b